sábado, 8 de noviembre de 2008

El saber sí ocupa lugar


Existe un refrán que asegura que el saber no ocupa lugar, pero sólo es una verdad a medias. Cuando el saber se escribe para darlo a conocer a los demás, empieza a ocupar tanto espacio que con razón a los libros se les llama volúmenes. Basta acercarse a una biblioteca para comprobar cuánto espacio pueden llegar a ocupar.


Un ejemplo de la grandiosidad del saber lo constituye el Museo del Ermitage, galería de arte pública rusa, el mayor museo de los existentes en este país y uno de los más importantes del mundo, situado en San Petersburgo. Fue fundado por Catalina II en 1.764 como Museo de la Corte. En un principio sus fondos los constituían obras de arte de Europa occidental que la emperatriz había adquirido de colecciones privadas. Dichas obras quedaron expuestas en el pequeño Ermitage, galería privada adyacente al Palacio de Invierno. Aumentadas a gran escala por los sucesores de Catalina, las colecciones se ampliaron al viejo Ermitage. Tras un incendio en el Palacio de Invierno en 1837, el Ermitage fue reconstruido, y se abrió al público en 1.852. A raíz de la Revolución Rusa (1.917), pasó a ser propiedad pública.

En la actualidad, las colecciones ocupan cinco magníficos edificios intercomunicados, incluido el Palacio de Invierno. Los lujosos interiores de estos edificios, ya de por sí de gran importancia histórica, constituyen un rico marco para las colecciones, que cubren de hecho todos los aspectos de las bellas artes y de las artes decorativas, desde la antigüedad clásica hasta la pintura del siglo XX, contando además con piezas de arte ruso, de culturas no occidentales, de arte oriental, así como monedas y joyas.

Su superficie actual es de 75.000 m2; alberga unos dos millones quinientas mil obras, repartidas en 322 salas en diferentes departamentos: cultura primitiva, cultura y artes del mundo antiguo, artes de la Europa occidental, con una importantísima colección de pintura francesa, italiana, de las escuelas flamenca y neerlandesa, española, alemana e inglesa, historia de la cultura rusa, cultura y artes del oriente soviético y de Oriente, y numismática. El museo posee también un taller de restauración, biblioteca y archivos.

¿Quieres saber cuánto tiempo necesitarías para poder ver este Museo?

- Dedica 1 minuto para cada una de las obras
- Necesitarás 2.500.000 minutos sin contar el tiempo que necesitarás para desplazarte de una sala a otra, de una obra a otra.
- Un día tiene 1.440 minutos (24 x 60 = 1.440) así que cada día puedes disfrutar de 1.440 obras de arte.
- Como 2.500.000/1.440 = 1.736,11111..., vas a necesitar por lo menos de 1.737 días.
- Y ademas como1.737/365 = 4,75890411, tendrás que invertir 4,76 años para visitar todo este museo y eso sin tener en cuenta el tiempo necesario para desplazarte entre las distintas dependencias del Museo y sin tomarte ningún descanso, ni siquiera para dormir.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay una bella perfección en el mundo de los números, una legendaria magia. Me atrae su simbolismo.
Un beso y que nunca muera el saber.

Pedro J. Sabalete Gil dijo...

Qué vertigo...No sabía que tenía tantísimas obras expuestas.